ARTICULOS SOBRE CONEJOS
La llegada a casa
Son muchos los adjetivos que pueden describir a estos pequeños animales, por ejemplo dulces, tiernos, simpáticos, alegres, juguetones, entrañables y así hasta un sinfín de adjetivos, que hacen que el conejo sea aceptado como un maravilloso animal de compañía, ya sea por su carácter o por su apariencia.
Si usted está pensando en incorporar un conejo en su familia, hay algunos detalles que debería tener en cuenta, para facilitar la incorporación y adaptación de este pequeño peluche a su nuevo hogar.
En primer lugar debemos intentar que los primeros días esté lo más tranquilo posible, para que se vaya acostumbrando a los olores, sonidos, movimientos y a todo su entorno. Si lo cogemos muy a menudo, aumentaremos el nivel de stress, que ya le ha producido el viaje y el cambio en su rutina, pudiendo provocar trastornos en su salud.
Eso no significa que no podamos hablarle, acercarnos a su jaula para darle mimos e incluso acariciarlo, pero sin sacarlo de la jaula y sin cogerlo.
A partir del segundo o tercer día, podremos empezar a cogerlo y ponerlo en nuestro regazo, para que vea que con nosotros no le pasa nada malo. Podemos empezar a jugar con él de una forma tranquila, si vemos que se pone muy nervioso y que solo quiere esconderse o huye de nosotros, lo volveremos a dejar en la jaula, y lo intentaremos más tarde. Un truco para ganarnos su confianza más rápidamente, es acariciarle las orejas y la cabecita, ya que le recordará los mimos de su madre, y hará que se sienta más tranquilo, relajado y seguro.
Una vez se haya acostumbrado a la jaula y a nosotros, es recomendable sacarlo periódicamente de la jaula para que haga ejercicio y reconozca todos los elementos que le rodean, siempre bajo nuestra supervisión. Hay que tener especial cuidado con los cables, ya que podría roerlos, y eso sería fatal para él. No olvidemos de ir hablándole para que vaya reconociendo nuestras voces, y vaya asimilando su nombre.
Aunque los conejos son animales muy silenciosos, no aconsejamos ponerle un cascabel para saber dónde está, ya que es muy molesto para ellos.
Con un poco de paciencia, conseguirás ganarte su confianza, y tener un precioso conejo adiestrado.
